Las semanas continuadas de cierres fronterizos y de irregularidades e ilegalidades de todo tipo que se están produciendo en la frontera de Melilla con Marruecos ha acabado con la paciencia de todo el mundo y está haciendo peligrar gravemente muchos puestos de trabajo tanto de ciudadanos españoles como de trabajadores transfronterizos. Desde Los Verdes de Melilla, pensamos que “esta situación caótica lo que demuestra es la incompetencia del Delegado del Gobierno, del Presidente de la ciudad y de los responsables máximos de la frontera para aportar soluciones que devuelvan la normalidad a la situación y su ineptitud y torpeza para gestionar acuerdos con todas las partes afectadas”.
Toni Roderic, presidente de La Federación de Los Verdes de España, ha manifestado que “ciudadanos españoles se vean atrapados en la frontera sin poder acceder a su residencia es una ilegalidad que no solo no se debe permitir sino que es denunciable y que no sabemos exactamente a qué intereses bastardos responde aunque nos lo imaginamos. Es intolerable el trato indigno que se nos está dando a todos”.
Yonaida Sel·lam, Presidenta de Intercultura, señala que “hace tiempo que denunciamos la mala gestión de la frontera y los problemas de todo tipo que acarrea a todos los ciudadanos en general y al comercio de Melilla en particular. Melilla debe ser la única ciudad fronteriza del mundo en la que los responsables políticos están hundiendo a marchas forzadas su economía: no hay otro ejemplo mundial de una situación como esta”.
“La problemática de la frontera es un ejemplo más del agotamiento político del PP de Imbroda que sin proyecto de futuro para la ciudad, ni ideas para favorecer su futuro económico, se empeña en continuar con proyectos fantasmagóricos y con la vieja receta del clientelismo y de la subvención -pan escaso para hoy y hambruna durísima para mañana- acabando con el pequeño comercio tradicional e incluso con el comercio de las grandes cadenas comerciales en vez de mantener los usos y costumbres de todas las culturas melillenses” -ha indicado Roderic.
“El comercio fronterizo tradicional y típico melillense ha sido históricamente una pequeña válvula de escape para la integración y estabilidad regional -como pasa en todas las ciudades fronterizas del mundo- al ser una fuente de ingresos para muchas familias y jóvenes. Y que, despojado -y en eso es en lo que se debieran de preocupar la casta dirigente melillense- de los problemas que afectan a los derechos laborales de los trabajadores, de la problemática legal del transporte de mercancías, y del respeto a los derechos humanos, debiera continuar tirando -al menos de momento hasta que haya otras fuentes económicas- de la situación agonizante de la economía melillense” -ha señalado Yonaida Sel·lam.
“Desde Intercultura y Los Verdes pedimos que se encare la problemática con seriedad y se busquen soluciones reales a toda la problemática que genera la frontera con participación de todos: partidos, comerciantes, hosteleros, pequeño comercio, vecinos y otras asociaciones. Solo con el consenso de todos, y viendo las repercusiones que pueden generar las decisiones se podrá avanzar en la solución del problema, que es ya urgentísimo resolver” -han concluido la Presidenta de Intercultura y el Presidente de Los Verdes.
